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Tradicionalmente, los canteros trabajaban a mano con puntero, cuña y maza.
Primero realizaban incisiones en la roca con el puntero, una varilla metálica con uno de sus extremos afilado. Ponían el puntero en ángulo recto sobre la superficie de la roca, y lo golpeaban con la maza, hasta obtener un orificio que iban agrandando. Son los orificios que se aprecian en la foto superior.
Cuando lograban el tamaño deseado introducían las cuñas, prismas triangulares que aparecen en la foto de la derecha, y con la maza iban martilleando una a una en línea hasta un punto en el que que la roca se abría por sí misma.
Roca mostrando los orificios en los que se introducían las cuñas
Cuñas insertadas en la roca, al martillearlas la roca se parte
Mapa que muestra el recorrido de la ruta.
Presiona en uno de los botones para obtener el track de la ruta
RUTA DE LAS TRES CANTERAS
EL itinerario etnográfico perfilado por las tres principales canteras cercanas a Santa María del Berrocal esbozó la última ruta del Club Berrocaminos, decimos esbozó porque como ya adelantamos la ruta esta vez quiso alejarse de veredas y senderos y retrotraernos a la infancia saltando paredes y atravesando prados y mostrándonos la cara más aventurera del club.
Antes de alcanzar la primera cantera el camino nos desvela la primera pista de la ruta, una gran piedra marcada por numerosos agujeros alineados en su base. Parecen ser causados por las incisiones que se realizaban con el fin de obtener la piedra.
En la parte más alta de la roca, señalada con la flecha, observamos una grieta que sugiere ser la causante del trabajo inacabado.
Puedes observar el proceso en el vídeo titulado: "como se racha una pedra de granito"
Cantera de la Sierpe
Al llegar a la cantera de la Sierpe comprobamos como las áreas de montaña han sido escenario de actividades económicas basadas en el aprovechamiento de sus recursos naturales configurando un paisaje peculiar en el que encontramos las evidencias que constituyen nuestro patrimonio cultural.
En la subida a Las Cabezas y a los diferentes puntos que elegimos como miradores sobreviene la encrucijada, decidir hacia dónde dirigir la mirada. En el horizonte el impresionante macizo nevado de Gredos y en el precipicio el Valle, desde donde la recién instalada primavera nos envía las señales de su plena efervescencia.
Pletóricos prados verdes configuran la senda hasta la segunda cantera, la cantera de los Caños en la que pudimos observar todavía las marcas de los últimos trabajos realizados sobre ellas, cortes limpios sobre grandes piedras rectangulares y expertos troceados de los bloques de piedra.
Cantera de los Caños
Nos explica Javier que gran parte de la piedra extraída en esta zona se utilizó para la realización de aceras y empedrados en las calles, considerada una de las obras estructurales de mayor envergadura en Santa María del Berrocal.
Paramos a reponer fuerzas a la sombra, en una zona muy agradable que nos protegió del calor del día.
En el camino observamos esta noria en la que se se puede apreciar un excelente trabajo de cantería
Cantera de la Muela
Por último, en la cantera más reciente, la de La Muela, apreciamos la introducción de la mecanización en el trabajo de la cantería. Gracias al uso de la maquinaria pudieron perforar con barrenas consiguiendo profundos agujeros que hacían posible el uso de unas cuñas más largas lo que se traducía en una mayor efectividad a la hora de partir la roca.
La pureza de la roca de esta cantera la hizo idónea para la construcción del palacio de la duquesa de Alba en Piedrahita, en el siglo XVIII. Las marcas que ahora vemos en la piedra son el resultado de unas catas que se hicieron recientemente pensando en una posible nueva apertura de la cantera. Pero la idea fue abandonada.
Y aquí acabó La Ruta de Las Canteras de la que esperamos todos disfrutarais.
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